domingo, 20 de marzo de 2011

Infoxicación

Hace unos días, observe  un comercial de televisión acerca de un término denominado "Infoxicación" que trataba de describir la intoxicación de información a la que estamos sometidos diariamente. Considerando que se trataba de un comercial hecho para una conocida marca de autos de lujo, el cual fue transmitido 14 veces en menos de dos horas (lo cual me dejo algo infoxicado) me pareció interesante abordar el tema en este post.

En 30 segundos el spot plantea lo mucho que tu vida se complica al tener a tu alcance una amplia gama de opciones y pone como ejemplo los muchos amigos virtuales con los que cuentas, el cada vez mayor número de opciones de agua para beber que existe y las diversas tonalidades de colores para elegir que están a tu disposición, para al final venderte la idea que aún existen cosas que se deciden solas como el auto que quieren que compres.

En realidad el comercial tiene cierta razón al advertirnos acerca de la sobre saturación de información a la que estamos expuestos, pero por otro lado esa información existe por que existe quien la consuma y la demande, es decir si estamos infoxicados es por que así lo hemos decidido y/o promovido.

Hay principalmente dos cuestiones que me preocupan de este desenfrenado consumo actual de información, el primero se refiere a la dirección que el interés colectivo aparentemente refleja y el segundo tiene que ver con el cierto nivel de incongruencia que los consumidores de esta información evidencian.

Para abordar estos dos tema, me gustaría inicialmente introducir la idea de que gran parte (si no es que la totalidad) de la información que nos rodea es generada con el propósito específico de venderte algo (una idea, un producto, un partido político, un auto, entre otras muchas cosas). A su vez, el diseño de la publicidad en cuanto a su contenido, su presentación los horarios y canales de transmisión esta construido y dirigido de acuerdo a los gustos y anhelos de aquellos consumidores a los que se desea llegar.

Es por ello que la cerveza, los autos de lujo y los deportes vienen acompañados de mujeres espectaculares; así como las campañas políticas, los autos familiares y las casas son representadas por familias unidas e increíbles escenas de perfecta felicidad.

Una vez aclarado esto, tocaré mi primera preocupación; la dirección que el interés colectivo parece mostrar; es de inquietar la atención y cantidad de tiempo que las personas dedicamos a enterarnos de la vida de otras personas, lo más preocupante es que muchas de las personas de las que estamos pendientes ni siquiera las conocemos, tan solo basta acercarse a un expendio de revistas para ver que las relacionadas a chismes y farándula son las más vendidas, agreguemos a ello la estadística que habla de que el grueso de la población lee solamente la sección de sociales y deportes del periódico y tenemos un gran porcentaje de información consumida que en poco o nada va impactar de forma positiva en tu vida.

Con lo anterior tampoco pretendo proponer que el conocer acerca de los demás es malo, pero siempre hay que preguntarnos ¿para qué quiero esa información? no es lo mismo informarme de los chismes y rumores de la vida amorosa de los famosos que estar al pendiente y ocuparme del estado de mis amigos y mi familia.

Así mismo, llama la atención lo mucho que desperdiciamos en saber de los demás y lo poco que invertimos en saber acerca de nosotros mismos. ¿Pueden imaginar lo que sería de nuestras vidas si ese tiempo y esfuerzo lo aplicáramos en nosotros mismos? No tengo una respuesta específica para ello, pero darnos tiempo para averiguar sobre nosotros mismos al menos nos ayudaría a conocernos mas y el conocernos más nos hace descubrirnos y ser mejores personas.

En cuanto a la incongruencia que como consumidores mostramos, tan sólo me gustaría mencionar que la publicidad que nos ofrecen cada vez es más irreal, fotos alteradas, promesas milagrosas, historias surrealistas, falsas esperanzas, cifras maquilladas y vídeos retocados son tan sólo una parte de las muchas técnicas usadas en la información que nos ofrecen.

lo incongruente de nuestra parte es que a pesar de que lo sabemos, no sólo lo compramos sino que seguimos demandándolo, lo anterior me quedo más claro al recibir un excelente video con un gran mensaje para combatir la forma que tenemos de ver a las mujeres como objetos, pero lamentablemente a pesar del buen mensaje, la portavoz presentaba precisamente una imagen de artículo de lujo, que para mi representó una gran y desafortunada incongruencia.

La información, incluso en exceso es buena, lo importante es que nos demos cuenta de que tenemos capacidad de decisión y que la usemos en nuestro beneficio, así mismo es importante sobre todo que identifiquemos que contenidos estamos consumiendo y para qué y cómo los estamos utilizando.

La tecnología nos ha ayudado a acercarnos a otros planetas, a nivel mundial ha acercado economías y regiones, posteriormente nos ayudo a acercar países, en la actualidad a través de las redes sociales móviles se ha dado un gran paso y esta acercando a las personas en relaciones cada vez mas fuertes y sostenidas, pero considero que la tecnología tiene una gran deuda con nosotros, la tecnología y sobre todo la de la información y comunicación tiene una gran barrera que librar y esa es la barrera interior, la tecnología ha hecho muy poco o casi nada por ayudar a acercarnos y conocernos a nosotros mismos.

Debemos aprender a conocernos, a auto recordarnos y a ser conscientes de nuestras competencias por que sólo así podremos potenciarlas y tener un mayor bienestar y calidad de vida.